10 de junio: Día Nacional de la… ¿(In)Seguridad Vial?
A 75 años del ´revolucionario´ y radical cambio del sentido de circulación vehicular, cuyo objetivo era igualar criterios, y con ello lograr la unión en todo el continente americano y al que sobre el final y casi obligada, se sumó la República Argentina el 10 de junio de 1945, aún tenemos una deuda social que saldar en materia de seguridad vial.
Fue quizás en aquella época en que se comenzó a pensar en el tránsito
en Argentina. Por primera vez como país, se tomaron medidas para garantizar una
circulación más segura en aquel entonces y para la posteridad. Pero este hecho
tan importante, que intentó sembrar las semillas de la seguridad vial, fue
olvidado por décadas, hasta el punto que los siniestros viales se convirtieron
en una de las principales causas de muerte en nuestro país. Actualmente nuestra
sociedad mantiene una deuda social consigo misma, ya que la problemática vial no discrimina sexo, genero, edad ni clases.
A lo largo del tiempo y por generaciones,
el desconocimiento, la despreocupación, la falta de conciencia social, el
desacierto de las políticas públicas y el deficiente control estatal han sido
algunas de las causas de la inseguridad vial.
En los últimos diez años, se han generado alrededor de 10 millones de
choques, más de 1 millón de heridos y más de 50 mil pérdidas de vidas en rutas,
avenidas, calles y caminos de nuestro país.
Sin embargo, estas alarmantes cifras de víctimas en
siniestros de tránsito no parecen ser motivo de disuasión o preocupación para
los que diariamente se manejan con imprudencia. Una imprudencia que genera un costo humano y social muy alto. Detrás
de ellas hay familias que afrontan pérdidas irreparables, personas que ya no
volverán a ser quienes eran, así como costos de salud física, psicológica y
emocional, sin contar las pérdidas económicas que asume toda la sociedad.
Siempre que se conocen las causas de los mal
llamados accidentes, surge la certeza de que se podrían haber prevenido en un
alto porcentaje de casos. La mayoría de ellos son generados por conductas inseguras evitables. Todos transitamos en el
espacio público, desde el momento en que pisamos la calle, seamos conductores o
simples peatones, debemos hacernos responsables de nuestro proceder.
Lo cierto es que, para lograr reducir la inseguridad
vial se debe trabajar objetivamente en
la cultura vial de los argentinos, una tarea
que demanda mucho tiempo y especial dedicación, que trasciende las gestiones y
que requiere del compromiso y responsabilidad de toda la población. Tanto de
los gobiernos en sus diferentes estamentos (nación, provincia, municipios), del
sector privado, de las distintas instituciones educativas, de las organizaciones
de la sociedad civil como la sociedad en su conjunto; deben involucrarse en
esta problemática que se cobra miles de vidas por año.
Todos los individuos que viven en
sociedad deben entender que son actores fundamentales en este proceso, en esta
transformación y es imprescindible que se involucren y que tomen real
conciencia para mejorar y evolucionar. Vale la reflexión en este día histórico.
Salir a la calle como peatones, ciclistas, motociclistas o conductores requiere
de un compromiso, concretamente, la responsabilidad de cumplir las normas
de tránsito. Si aplicamos esto no solo estaremos dando cumplimiento a las
normas que nos regulan como sociedad, sino que cuidaremos y respetaremos a los demás.
Fernando Capponi
http://www.safetygroup.com.ar/nota.php?id=58
Gracias ONG Malditas Picadas por compartir esta reflexión. La inseguridad vial destruye vidas al igual que las picadas clandestinas. Seguiremos luchando para que la sociedad entienda que respetar las normas es respectar la vida y que condenamos fervientemente las malditas picadas en la calles que se cobran vidas de inocentes. Las picadas callejeras matan, si les gusta correr al autodromo muchachos, no hay excusa si tienen guita para "preparar" el auto tienen guita para pagar la tarifa y correr sin poner en riesgo mas que sus vidas...
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